domingo, 27 de septiembre de 2009

No me culpes

Cuando yo te entregaba mi amor sin condiciones,
tu lo rechazabas lo ignorabas y saboteabas.

¿Por qué?
Esa siempre fue la pregunta
pero nunca llegó una respuesta
y mi amor poco a poco en el olvido se fue acabando.

Una tarde, cuando llegué a tu casa con la mas dulce esperanza de plasmar para siempre mi amor en ti, tu te enojaste ¿El motivo? no lo se, como el de muchos otro enojos, eso hizo que yo por fin saliera de ese sueño interno, donde tu me tenías metida, porque era solo eso, un mendigo sueño.

Después de eso yo me decidí ha encerrarme en mi misma.
Después de un tiempo,
llegó otro amor.

Un amor,
de los cuales yo nunca había tenido:
lindo, tierno, etc.
Ese amor llegó hasta el fondo de mis ilusiones,
de mis sueños y anhelos.

Teniendo solo dos días de convivir con él,
tu te decidiste a regresar a buscarme,
a llenarme de amor como antes no lo habías hecho
y yo loca creyendo que realmente ibas a cambiar.

Regresé a ti,
pero me di cuenta de que me había enamorado
del que fue mi amor y preferí dejarte otra vez
a que retomes el camino que un día preferiste.

Y yo seguí con ese amor
el cual me rescató de ese hondo abismo
donde algún día tu me metiste.

Solo ahora te pido que no me culpes.
Yo no tengo la culpa de que mi corazón
te haya dejado de querer,
tu solo eres el que tienes la culpa
porque yo te amaba y tu solo me ignorabas.

Ahora me ruegas
y pensaste que regresaría contigo,
pero ya se que nunca cambiarás,
por eso te digo adiós,
para siempre adiós mi gran amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Privacity